Este tipo de tumores crecen a partir de células anormales del interior de la cavidad nasal o de los senos paranasales. Existen clásicamente 2 tipos de tumores: los benignos y los malignos. Los tumores benignos tienen una mejor evolución y son más sencillos de curar. Los tumores malignos son más destructivos localmente y requieren tratamientos médicos y/o quirúrgicos más complejos.

La mayoría de los tumores que se encuentran en nariz y senos paranasales son de tipo benigno, los más comunes son quistes y pólipos.

Cualquier tumor en estas regiones debe ser analizado cuidadosamente debido al gran riesgo de que sea maligno, sobre todo si el paciente es fumador. Su tratamiento es en la mayoría de los casos con cirugía endoscópica avanzada.